Justo Buenaventura Jaimes Villarreal, quien en el 2007
fue designado director de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en Baja
California, fue ejecutado en Amacuzac, Guerrero, cuatro días después de rendir
protesta como director de la Policía Municipal.
Los hechos se dieron el viernes alrededor de las 22:10
horas cuando se reportó a la corporación policíaca de Amacuzac que el reciente
director había sido sorprendido por un comando armado, el cual dio fin a su
vida y la de uno de sus escoltas de nombre Carlos Bahena Martínez, al ser atacados
tras haber salido de una reunión de trabajo sobre la carretera Amacuzac-Taxco.
Minutos después paramédicos arribaron al sitio donde
oficialmente se dio a conocer el deceso del director, por lo que de inmediato
se trasladó a tres hombres más integrantes de su escolta para ser atendidos en
diversos nosocomios de la entidad.